Miles de personas recibieron el Nuevo Año en una rave ilegal en Murcia
Según datos de la Guardia Civil de España, alrededor de 5.000 personas, pasaron su nochevieja en una “rave” ilegal desarrollada a las afueras de la localidad murciana de Fuente Álamo, que según organizadores en redes sociales, pretenden extenderse hasta el fin de semana cuando se celebre la festividad de Reyes Magos.
Esta es la excusa para extender el festival alternativo de música electrónica que no cuenta con ninguna autorización y que se está realizando desde el sábado en el circuito municipal de velocidad Los Milanos.
Jóvenes y otros, no tanto procedentes de diversos puntos de España, Francia, Alemania e Italia, empezaron a llegar al lugar entre el viernes y el sábado, los primeros rompieron el cerrojo de la puerta principal del recinto para acceder a este.
En esta área se puede notar decenas de coches, furgonetas y caravanas que han montado sus tiendas de campaña, escenarios y puestos de tomates, cervezas, quesos, camisetas y otros objetos.
La instalación se planeó en el 2005 como pista de pruebas para equipos de Fórmula I, al final ha resultado todo un fiasco por vicios ocultos, en el terreno para la construcción de infraestructura y por ello, se encontraba casi abandonado.
La fiesta ilegal de remix de la ‘rave’ que en los últimos días de 2022 se dio en Granada, esta vez eligió una zona repleta de montañas para fumar, beber y bailar, sin molestar a nadie y sin obedecer a nadie porque es llamada la fiesta de la libertad.
Vecinos y expectantes
Lo que más se ve en la ‘rave’ es la diversidad sexual, de idiomas, culturas, papeles improvisados y carteles que indican que se debe respetar la limpieza de la zona. Esto puede ser una de las preocupaciones de Fuente Álamo.
Será necesario ver cómo quedará todo cuando se vayan, se sabrá si molestan, tienen cierta preocupación.
La Guardia Civil, ha realizado alguna ronda de vigilancia desde el exterior, admitiendo que el ambiente es tranquilo por los momentos, de esto dan fe algunos vecinos del pueblo, que se acercaron al circuito porque les gusta la fiesta y querían saber que hay montado en las afueras.
Las edades de los asistentes rondan entre los 20 y 30 años, Cama, de Barcelona, tiene 43 años y está encantado con el paisaje seco de Fuente Álamo. Para él es un privilegio vivir en el lugar, espera quedarse hasta el final de la fiesta, que muchos creen que terminará después de Reyes.
Desde Cádiz, llegó al circuito un motero que va a todas partes y asegura que hay muchas caras conocidas de grandes fiestas multitudinarias que se celebran por toda Europa, se enteró de la convocatoria mientras trabajaba en Francia. Aquí no existen normas porque todos saben lo que tienen que hacer.
Preocupación de las autoridades
Por los alrededores no han establecido un dispositivo policial fijo y se ve una hilera de coches, furgonetas, caravanas y música, mientras en el ambiente se respira el olor de los festivales.
La Guardia Civil en los próximos días espera identificar a los asistentes a la rave, ya que es ilegal que estén en el lugar.
