Si tus hijos aprenden inglés se abrirán muchas puertas

Desde niño, habrás escuchado decir que aprender inglés es crucial para el desarrollo profesional; y seguramente habrás pensado “¿Para qué aprender otro idioma?”, o quizá has desistido de aprenderlo porque es muy difícil, porque te parece que se habla al revés. A tus hijos, seguramente, les debe pasar igual; y sin importar cuántos cursos hagan notas que se les dificulta aprender piensas “¿Por qué resulta tan difícil aprender si a otros se les hace tan sencilo?” “¿Cómo puedo ayudar a mi hijo?”

Los primeros pasos

No puedes abrir una puerta sin la llave correcta, ni con un cerrajero. Aprender un idioma suele ser difícil para muchas personas, pero a otras se les facilita. ¿Por qué pasa esto? Por una sencilla razón: Aprendieron su idioma nativo muy bien.

Durante los primeros años de tus hijos, en el caso del español, aprenden las vocales, alfabeto, números, colores, cómo formar oraciones, y afines. Conformen crecen, aprenden las categorías gramaticales (sustantivos, verbos, adverbios, etc), signos de puntuación, fonética, así como su debido uso. Precisamente, es aquí donde radica el secreto para aprender un nuevo idioma.

Cuanto más puedas aprender de tu idioma nativo, más sencillo te será aprender cualquier otro idioma que te propongas.

Herramientas que facilitan el aprendizaje

Con las nuevas tecnologías, existen aplicaciones para teléfonos inteligentes que te permiten aprender este nuevo idioma; todos los inicios son difíciles, el secreto está en la práctica consistente de lo que se ha aprendido. Dirás que esto ya lo sabes, y realmente te cuestionas sobre cómo ayudar a tus hijos con su aprendizaje del nuevo idioma; más aún si tu conocimiento al respecto es poco.

Lo primero que debes hacer es practicar con tu hijo el alfabeto, no importa si tú no sabes porque existen múltiples herramientas audiovisuales que les ayudarán a ambos durante el proceso (los videos musicales del abecedario en inglés siempre ayudan). Acto seguido, continúa con los números; del uno al veinte suelen ser los más complicados, porque del treinta en adelante es una repetición. Prosigue con los colores, y luego a combinar estas palabras para formar frases sencillas como por ejemplo: “red car” (carro rojo).

Otra herramienta muy útil es escuchar música en inglés, aunque no la entiendas. Acostumbrar al oído a escuchar algo diferente ayuda a la mente adaptarse a este nuevo reto. Para esto, con la finalidad de fortalecer la gramática y fonética a la vez, puede optar por escribir laletra de la canción con las palabras en inglés tal como suenan (escritura fonética) y a un lado escribir el mismo con las palabras escritas correctamente.

Una vez aprendido lo más sencillo pueden aumentar la dificultad hasta lograr mantener una conversación fluida, esto requiere pensar en inglés. Es más sencillo de lo que parece, por eso se recomienda ver películas con el audio en inglés (primero con subtítulos en español) y escuchar (o ver videos con subtítulos) música en inglés para saber qué es lo que dicen, luego pueden hacer lo mismo pero con los subtítulos en inglés para aprender cómo se escriben las palabras.

Siempre ten presente que la práctica constante es el secreto de la excelencia.